miércoles, 4 de mayo de 2016

Control


Como cuando me di cuenta que la televisión me hacia alucinar y la apagué. Desde ese día la apagué, por que era la única alucinación que podía "controlar". Así mismo hace dos años apagué la magia.

El miedo me hace perder el control e intentar recuperarlo significa apagar cosas, cerrar puertas, prender luces.

La magia es miedosa. Miedosamente incomprensible y lo que no puedo comprender lo aplazo para después.

Hace unos años escribí una historia, le llamé Una historia por entregas para nunca volverla a contar. Tuvo una sola entrega, esa historia también la apagué. Después de narrar páginas enteras de algo que pareció un dejavú de otra vida, de otro mundo, de mi vida y de mi mundo, concluí:

No sé que pensar, pero reafirmo lo dicho en el principio de esta historia, el que desea corre el riesgo de que se cumpla y la magia es parte de la vida, no algo que podamos inventar y mucho menos controlar. Decirle no a la magia, apaga la fe. Y sin fe la vida no funciona, simplemente no anda y parar sería peor que dejar de agradecer.

De la diferencia entre la nova y la súper nova

  • Reiniciar 
  • En reposo
  • Apagar

Los equipos tiene estas tres opciones, por que yo no.
O depronto si. Es posible que haya estado en reposo seis años. Es posible que ya me haya acostumbrado a estar en estado de ahorro de energía y lo poco que queda de batería lo tenga guardado para un gran finale.

Siempre había creído que robaba energía de las personas, pero de un tiempo para acá pienso que ya no uso la mía para mí, sino para los demás. Y siempre tengo esa palabra alentadora para los momentos difíciles de quienes más amo, y es eso lo único que me recarga, estar aquí para los que más amo. Y no hacerles eso... 

Me impulsan las consecuencias de mis decisiones, pero realmente no me motivan. Ya no actuó para mí, lo hago para mi vida. Decido de manera holistica, he intentado no volver a ser egoísta, sé que se lo debo a mi Camarixen. Que me hizo caer en cuenta en que pensar en mi, solo me hace ser odiosa. No todo tiene que ver conmigo ni pasa por y para mí. El noventa y nueve por ciento de las cosas que pasan siempre tiene que ver con algo o alguien más y eso les gusta pensar, somos planetas que giramos con un espejo en las manos, no hay centro solo oscilación y reflejo. 

Hoy yo quiero voltear el espejo, quiero que mi reflejo, el de mi espejo, rebote. Dejar de verlo y que cuando pegue con una verdadera nova, encandelille a los demás. 
Y entonces, solo entonces, nos sentemos a pensar de que están hechas las estrellas.

Sobre los flash back

Eve Babitz y Marcel Duchamp, Tate gallery

Antes de escribir esta entrada debería releer la entrada sobre las especulaciones/alucinaciones.
Está claro que mi moodchart dejó de ser útil el mes pasado (otro supuesto) cuando lo empecé a manipular a él también.
Sentí depresión el lunes. Tuve un instinto suicida el martes, salí con mi mejor disfraz el miércoles y salí a cazar el viernes. En retrospectiva ese fue mi verdadero moodchart. Se me pegó la aguja y busqué que así fuera. Estoy obsesionada con mi obsesión y con hacerlo también una decisión.
Quiero incluso poder ser "consiente" de haber pasado por cada uno de lo que yo llamo etapas. Para poder ahora hacer catarsis y justificarme y así piar cada una de mis culpas aún que no quiera sentir culpa.
Volví a ser soberbia y volví a retarme a mí misma y volví perder.
Cuando voy a aprender que con conmigo misma no puedo ganar? 
No aluciné, todo fue real. Él cantó esa canción en mi cabeza y en el asiento de atrás.